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Una de las frases más populares del argot venezolano es “¡Hay agradecer a Dios que no se está en una cárcel, en una funeraria o en un hospital!” pero, en los últimos años estar en cualquiera de esas opciones o no, resulta exactamente lo mismo, puesto que los pranes gobiernan las calles, morirse ahora es un lujo y estar en un hospital es exactamente lo mismo a estar en medio de la nada, ya que sin medicamentos, sin vacunas, sin equipos de estudio y hasta sin médicos, llegar a un hospital significa hoy para los venezolanos iniciar el sendero a la carnicería madurista.

Enfermedades infecciosas que se creían ya erradicadas como Sarampión, escabiosis (sarna), fiebre amarilla, tuberculosis, dengue, paludismo, malaria y difteria vuelven a incidir , esta vez sin opción a ser tratadas por falta de insumos. Pacientes de tratamientos de cuidados básicos como la diálisis mueren por no tener acceso al tratamiento cuyo proceder es tan sencillo pero tan importante aunque para la narco dictadura no parece tener mayor peso o relevancia la agonía que viven los mismos.

Por otra parte, una un poco más dolorosa es el éxodo masivo de profesionales de la medicina que Venezuela está exportando involuntariamente, ya que estos son la esperanza de mantener algo de pie en el ámbito de la salud, y es que la crisis los empuja a escapar del mismo sendero en el que están encaminados tantos venezolanos, un sendero dibujado por el carnicero y dictador que al parecer así como no le teme a la justicia tampoco le teme a la muerte.

Finalmente, negados a conformarse con esta realidad, pacientes de distintas afecciones se mantienen firmes en la lucha para que lo que podría significar su último respiro, sople algo de vientos de tranquilidad para Venezuela. En manos de cada uno está permitir que la lucha de ellos no sea vano ni en soledad, las calles siguen clamando justicia, los venezolanos no se rinden, y es tiempo que en lugar de caminar el sendero de la carnicería madurista, demos fin de una vez por todas al holocausto de salud precaria que se vive en el país y caminemos firmes hacia la Venezuela que nos meremos, hacia un mejor futuro donde la viva la vida y viva la libertad.

@EsLaQuintero