Skip to main content
immediate bitwave Library z-library project books on singlelogin official

La grave crisis económica por la que atraviesa el país ataca directamente al sector privado, a las pequeñas y medianas empresas, teniendo un panorama bastante delicado ante esta situación. Podríamos decir que se encuentran desde hace rato en una situación de supervivencia.

El régimen se ha abocado a un control de precios que va mas allá de la capacidad de producción y de inversión de los empresarios, limitando el derecho a la propiedad privada, trayendo como consecuencia el cierre de muchas empresas, y a su vez el desempleo y la escasez.

Para nadie es un secreto que al régimen nacional, siendo ya un desgobierno, no le interesa en lo absoluto la estabilidad de estas empresas, dejándolo en evidencias con los constantes ataques que le han hecho al sector privado.

Vemos como unas “medidas económicas”, un control de precios y una hiperinflación destruyen este sector, donde muchos se ven en la obligación de bajar su santa maría o cerrar sus puertas por no poder abarcar estas medidas.

Una clara evidencia de ello, se vive en la Av. Santiago Mariño del Estado Nueva Esparta, que en sus tiempos, era referencia turística de la Isla de Margarita; tiendas abarrotadas de mercancía, y las aceras llenas de locales y turistas. Hoy en día, son pocas las tiendas que se encuentran abiertas.

Cada vez son menos las empresas que pueden subsistir con este declive económico por el que atraviesa el país. Con unas medidas que no solucionan la grave crisis, ni sustenta el bolsillo del venezolano. Una realidad de la que el régimen hace caso omiso, pues cada vez mas son las trabas y los atropellos, un nuevo sueldo mínimo que ya la misma inflación lo pulverizo, y sin aun entrar en vigencia, un control de precios que ocasiona escasez de productos, donde la opinión del empresario no es tomada en cuenta, sino, llevada tras las rejas, un nuevo cono monetario que termino de enterrar el Bolívar.

Desde que se implementó en Venezuela la inconstitucional Ley Orgánica de Precios Justos, el régimen a través de la tiránica Superintendencia de Precios Justos (SUNDDE) comienza una guerra en contra de los pocos productores y comerciantes privados que aún hacen o hacían vida en Venezuela, castigándolos por la retención de sus ganancias legítimamente obtenidas gracias a sus actividades mercantiles.

De esta manera, el régimen, inició una campaña en contra de la clase empresarial venezolana, disuadiendo así toda nueva inversión privada y reduciendo la producción nacional a su mínima expresión, causando así un desabastecimiento que abruma a los ciudadanos.

A pesar de esto, los ciudadanos están claros y conscientes de que estas medidas y estos controles no son la solución para esta grave crisis económica, al contrario traerá más desidia para el venezolano, más miseria y más hambre. Y saben que la única solución es la inmediata salida de Nicolás Maduro y todo su régimen.

#NoMásControles

@LauraGnzalez