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Las últimas y recientes lluvias registradas en la ciudad de Caracas, originadas a partir de junio por la convergencia intertropical y la llegada de ondas tropicales, ha originado inundaciones y lagunas en las principales avenidas y calles de la ciudad, producto del aumento del escurrimiento superficial en los suelos y la falta de mantenimiento de una red de drenaje ya obsoleta.

Asimismo las redes de drenajes de Caracas se encuentran colapsadas por la inadecuada disposición de desechos sólidos y por la mezcla de tuberías para recoger aguas de lluvias con aguas negras. El sistema de drenaje de la ciudad se divide en tres etapas: superficiales, bocas de visita y alcantarillas; las cuales, en su gran mayoría, se encuentran llenas de basura y escombros acelerando los procesos de inundación en las vías urbanas (ejemplos, se pueden apreciar en los sectores de San Pedro, Las Mercedes, Bello Monte, Artígas, Antímano, entre otros).

Esta problemática ha traído consecuencias negativas en la vida cotidiana de los caraqueños, así como en el tránsito automotor de la ciudad, lo cual evidencia la falta de una política de ordenamiento urbano-territorial por parte del régimen en los últimos 20 años y una imagen objetivo de lo que se quiere como ciudad en el ámbito urbano, servicios públicos y la calidad de los habitantes.

Es por ello que desde Vente Distrito Capital se ha venido conformando un equipo interdisciplinario de políticas públicas, enfocado en la formulación de un plan territorial  que coadyuve a resolver los problemas de servicios públicos actuales en un mediano y largo plazo, a través de la formulación de programas, subprogramas y proyectos que comprometa a las instituciones públicas y privadas, universidades y los habitantes de las principales parroquias.

En el corto plazo se propone ejecutar  las obras de ampliación de drenaje en muchos de los sectores de la ciudad (ejemplo, el mantenimiento del alcantarillado en la Autopista Francisco Fajardo), ampliación de las áreas verdes (con especies acordes con la zona que no generen otros impactos ambientales), realizar el mantenimiento de los sumideros de las principales calles y avenidas y llevar a cabo una política de sensibilización ambiental, referente a la adecuada disposición de desechos sólidos en las calles y avenidas.

Carlos Narváez