Íñigo Errejón, dirigente del partido político español Podemos, tropezó estrepitosamente con la realidad venezolana en su entrevista ofrecida a The Clinic. Una amplia parte de la conversación publicada reza sobre la coyuntura del país en la actualidad bajo un epígrafe que desvela de por sí su proclividad en dicha situación: «Defensa de Maduro».
Una defensa que, como mencionaba Martínez Meucci, politólogo venezolano, es insólita y fundamentada sustantivamente en la premisa «si la realidad no se ajusta con mi ideología, pues sencillamente no existe; no es realidad, jamás ocurrió». Las cosas son lo que son y no son lo que dicen que son, Errejón, y la ignorancia no exime de culpa; más allá de desmentir tus aserciones, aclararemos. La claridad es amiga de la verdad.
Errejón, no se come tres veces al día en Venezuela; deja de mentir tan cínicamente. Aproximadamente 8,2 millones de venezolanos ingieren dos o menos comidas al día y las que consumen son de baja calidad nutricional, principalmente tubérculos. Las proteínas prácticamente han desaparecido de la dieta.
¿Sabías que nueve de cada diez venezolanos no pueden pagar su alimentación diaria? ¿Lo sabías, Errejón? ¿Tenías idea de que ocho de cada diez venezolanos declararon haber comido menos por no contar con suficiente alimento en el hogar o por la escasez? Seis de cada diez venezolanos (64%) han perdido aproximadamente once kilogramos de peso en el último año por hambre. No quiero ni imaginar qué cifras arrojará el estudio del presente año en curso.
Confesaste no haber contado con el dato e inclusive no haberlo visto publicado en ningún sitio; es decir, negaste conocimiento de existencia. La sabiduría popular resumiría una respuesta para ti en una magnífica frase: «Es imposible tapar el sol con un dedo»; o es tan inútil, tan tonto negar los hechos –cuando se remite a ellos–, como querer tapar el sol con un dedo.
Errejón, no intentes respaldar públicamente las prácticas chavistas en Venezuela. Tus declaraciones son un visaje que nos sienta por ultraje a quienes somos venezolanos, y que, sin importar nuestras latitudes actualmente hemos experimentado los rigores del régimen en carne propia.
@josealleon