(San Antonio de los Altos. 03/04/2019) Un principio liberal básico es que el ciudadano tiene el derecho a transar bienes o servicios de la manera que mejor le parezca. Con el pasar de los siglos se idearon las monedas, y mucho tiempo después el papel moneda para facilitar el proceso. En la actualidad estamos tan acostumbrado al pago electrónico que en países desarrollados se discute la anulación del dinero físico en los billetes de alta denominación (50 y 100) sobre todo para destruir la economía negra (narcotráfico, venta de armas, trata de personas, etc.).
En nuestra realidad, ese bolívar en papel está destruido por el régimen y es obligatorio el pago en dinero electrónico, dando al traste con los comercios que no tienen o se les hace cuesta arriba pagar el precio que implica la adquisición de un punto de venta, logrando como resultado el cierre del establecimiento.
Por ello, y gracias a los constantes apagones que sufrimos, la capacidad del ciudadano de a pie ha tenido que resolver (emprender), principio liberal por antonomasia. Este acude al uso del Dólar o el Euro y lo que termina demostrando, a los burócratas que también lo hacen, es que ya hay menos personas usando nuestro papel moneda como lo estipula la ley, en el territorio nacional. De más está decir que esto es debido a la falta de efectivo en bolívares y a la inestabilidad de los precios en relación a él.
Han sido muchas las voces en el país para que se libere el Dólar, pero más las que argumentan el por qué deberíamos pasar a adoptar una moneda extranjera para las transacciones de la economía en el territorio nacional. Libros como “La segunda muerte de Bolívar” de José Luis Cordeiro, por nombrar uno que se puede descargar en .pdf, lo explica fácilmente. La realidad es que en socialismo eso no sucederá, por la razón que una vez, uno de sus mayores jerarcas, Aristóbulo Isturiz, argumentó: “Si liberaos el Dólar nos tumban”. Pero lo que no se dan cuenta los miopes socialistas es que la gente poco a poco va dolarizando o eurorizando la economía.
Ciertamente el que el Bolívar desaparezca, será cuestión de tiempo porque no sólo es un problema local sino mundial, ya las visiones económicas a largo plazo indican que en unas décadas el mundo tenderá a usar pocas monedas y quizás terminen siendo algunas criptomonedas o unas de naciones estables. Aquí en Venezuela, es evidente, no se ha hecho es gracias a la devaluación constante, desde 1.983, son muchos los burócratas socialistas que se han enriquecido usando esa triste y nefasta formula.
Lo bueno es que el caudal natural, que es liberal, en el ser humano seguirá usando monedas estables para seguir transando su economía diaria.
@jfmarcano