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Mucho ha sido la creencia que el Estado es el solucionador a todos los problemas específicamente a ese relacionado con la pobreza, un creencia que dice; si tenemos más Estado habrá menos pobres, porque el Estado es bueno, virtuoso y sin pensar mucho parece ser que sus recursos son infinitos, y por eso es el mejor aliado del pobre. Pero en realidad nos hemos puesto a pensar ¿cómo funciona el Estado?

Para no vernos tan complicado en un tema que es bastante extenso, centremos cómo funciona el Estado en materia económica y de poder, de manera general. En materia económica la pregunta que deberíamos hacernos es: ¿Como el Estado consigue financiar todos los gastos públicos? Ya sea en salud  educación, vialidad, pago a los funcionarios públicos y un sin fin de otros gatos. Es resumidas palabras como explicaba mi profesor de legislación fiscal, el Estado recibe dinero de:

1.- Los impuestos.

2.- Las riquezas del propio país (petróleo, minerales preciosos, entre otros).

En Venezuela particularmente el petróleo ha sido la mayor fuente de financiamiento del Estado, dejando a un lado el tema fiscal o colocándole en menor importancia como tema de recaudación. Mucho de lo que se financia en Venezuela es o estaba en manos del petróleo. Y si el petróleo paga la cuentas del Estado. ¿Qué tan involucrado estuviste en que se hiciera una buena gestión de ese dinero? En fin de cuentas el petróleo es de los venezolanos, todos y cada uno pero ¿Realmente manejamos nuestro petróleo, como dueño del mismo?

La respuesta es: no, no manejamos nuestro petróleo como nuestro, sino que delegamos esa administración o función al Estado, a diferencia de EEUU que si te encuentras por ejemplo un yacimiento de petróleo en tu propiedad, queda en manos del individuo, si explotarlo por su cuenta o vender dicho yacimiento. Pues es dueño de ese yacimiento petrolero. En Noruega el Estado toma los ingresos del petróleo, los divide entre toda su población y le hace un deposito a sus cuentas personales, a cada uno de ellos. Para que sean ellos quienes decidan donde es más conveniente gastarlo.

¿Y en que se relaciona esto con el poder? Pues de fondo vamos a entender esto con respecto al dinero:

Por ejemplo, tienes que viajar por cuestiones de trabajo, tienes que comprar el boleto, si tienes que comprarlo de tu propio dinero, que tanto gastarías, poco me imagino, es trabajo no es necesario ni pertinente gastar tanto dinero. Ahora si el dinero es ajeno, el de la empresa por ejemplo y no tienes limite en lo que gastes, te irías de viaje de trabajo en la clase más económica o en primera clase todo pago.

La respuesta es obvia, con dinero ajenos, no nos duele gastar. Ahora imagínense un Estado que recibe un dinero ajeno como lo son los ingresos petroleros, donde está a su disposición que gasto hacer y cuáles no. ¿Considerarían esa administración eficiente? Más cuando nosotros no nos involucramos para nada en su gestión. Ahora sumemos que ese Estado sea un Estado grande donde existen muchas personas trabajando en planes sociales, en salud, en la alcaldía, en las calles, con veinte ministerios de tal o cual asunto. Todas esas personas se pagaran con ese dinero que entra por el petróleo y con el criterio de dinero ajeno (aunque si bien los impuesto juegan un papel, como mencionaba anteriormente es más con el petróleo que se financia la gran parte del gasto público).

Entonces ser un Estado grande solo significa más burocracia, altas posibilidades de corrupción y menos eficiencia en la administración de los recursos. Todo aquello que deberíamos evitar para conseguir reducir la pobreza pues, menos recursos llegaran a los más necesitados y es lo que deberías tener muy en claro.

Sumado a que los recursos son limitados, como el petróleo, sus precios no son estables o que el mundo se mira en vía de consumir menos petróleo cada día. Es claro imaginarse que en realidad queremos es un Estado eficiente y pequeño, que nos permita participar y ser contralores en la administración de los recursos, para disminuir su poder, que solo se traduce en burocracia y corrupción, que la necesidad de perpetuarse más en el poder debido a los vicios que ya han adquirido, recordando que el Estado son hombres y mujeres que carne y hueso con dinero ajeno, y no solo ajeno, dinero que es nuestro y que nos pertenece a cada uno.

@djportillog