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No  tengo palabras para expresar el dolor tan profundo de ver la quema de nuestro Amazonas, el pulmón de oxigeno más grande del mundo, es una atrocidad lo que está ocurriendo y que tan solo hace unas horas es que se empiece a voltear a verlo, cuando se declaró en emergencia el 9 de agosto del presente año. Es increíble la falta de humanidad de los representantes del Estado en seguir campañas absurdas, banales, vacías carentes de sentido y de realidad, y claro, si no se conduelen de niños y ancianos enfermos, o del hambre de un pueblo que clama cambio, mejoras en su condición y calidad de vida; pues  menos del Amazonas, que aunque este año no ha sido víctima de una sequía importante versus otros años, presenta el incendio más grande que se haya visto en los últimos años, y tiene un solo responsable, la deforestación con fines comerciales, van más de 16 días de denuncias continuas, ¿se ha hecho algo realmente para parar la quema?

Cabe destacar que, no solo se quema el pulmón vegetal productor de oxígeno y el que puede evitar el acelerado calentamiento global, ¡es que por Dios! ¡se está muriendo la flora y la fauna, los animales corren para salvarse de una dramática extinción! ¿Es que acaso nosotros los humanos no somos los responsables de esas formas de vida, que alimentan nuestra hermosa tierra? Tenemos especies endémicas, es decir solo se encuentran allí, su ecosistema pertenece allí y fuera de él su extinción es muy probable, y por otra parte ya hay especies en vía de extinción, hay que humanizarse, son una creación de Dios y la mano del hombre no debe acabar con ellos, nos debe doler su dolor y nos debe importar acabar con nuestro pulmón vegetal surtidor de oxígeno.

Que tristeza ver que los representantes estadales solo estén pendientes de un show y no de lo realmente importante la vida, de ese pedacito del planeta que les tocó gerenciar. ¡Vaya! que eso es una responsabilidad muy grande, que no todos están en capacidad de ejercer.

 

Lourdes González