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Desde hace varios meses se ha podido evidenciar el incremento de indigentes, niños e incluso ancianos pidiendo dinero o simplemente deambulando en las calles sanantoñeras, consecuencia directa de un sistema criminal llamado socialismo.

Es muy conocido saber que San Antonio de Los Altos se ha caracterizado por ser un municipio seguro, limpio, con gente cálida y educada, pero la realidad  es que ha ido cambiando sustancialmente

El gran éxodo que hemos venido sufriendo como venezolanos a afectado indudablemente. Hoy el municipio Los Salias han tenido  ver a su gente salir del país, huyendo de una realidad socioeconómica que nos ha arropado a todos, impactando en todos los planos la ciudad que antes nos acobijaba y llenaba de confort a sus visitantes, hoy la verdad es que vemos ese San Antonio con luces grises causadas por usurpadores que saquean e intentan negociar un ruta: La salida de un sistema.

Hoy la que fue nuestra ciudad de brillo es testigo de una dolorosa escena socialista, con personas vulnerables a la crisis haciendo un llamado de auxilio a los transeúntes que hacemos vida en nuestra comunidad.

Socialismo: La repartición de la miseria. Un sistema muy bien pensado para mantener pisada a la población, sumergiendo a cada individuo en el hueco putrefacto repleto de apologías de necesidades.

Entonces ahora me pregunto yo como sanantoñera natal ¿Qué estamos haciendo? ¿Será que al ver a diario esto en nuestras calles lo iremos normalizando hasta el punto en que nuestra avenida perimetral se vea como las calles del centro de Caracas? ¿Será que estamos a tiempo de controlar esta situación sin desconectarnos de nuestra humanidad, sin dejar de ser solidarios con quienes tanta necesidad están pasando?

Será que con unos cuantos afiches solicitándole al transeúnte no dar dinero a quienes en la calle piden será suficiente para manejar tan difícil realidad que nos atañe diariamente, ¿Esto soluciona algo o por el contrario se incrementa?

Toda esta reflexión me lleva a una sola respuesta y es la organización ciudadana. La urgente necesidad que hoy nos llama a tomar protagonismo de los acontecimientos que nos aquejan a nivel local, estatal y nacional.

Todos tenemos el panorama más claro, tantos golpes nos han hecho madurar políticamente, por eso entendemos muy bien lo que pasa, ya no caemos en manipulaciones. En términos de liderazgo o dirigencia son muchas las caretas que se han caído, ya sabemos quién es quién, pero es necesario actuar y aprender que uno de nuestros principales errores en el pasado fue no haber participado en la política, exigiéndole a nuestras autoridades.

Aunque hoy vivamos en una especie de limbo gubernamental, es importante que entendamos las implicaciones de elegir correctamente y los electos rindan cuentas, sin rodeos y a tiempo.

Por eso, hoy estoy convencida que es posible organizarnos y apostar por un San Antonio en Lo Alto, con cada uno de los sanantoñeros que quedamos en este potencial y encantador municipio. El  talento, en conjunto con los cientos de profesionales vamos a lograr una organización vecinal que pueda aportar ideas para solventar el problema de origen: El sistema criminal que sacaremos de raíz.

Hay mucho que se puede hacer pero jamás resignarnos, jamás quedarnos de brazos cruzados apegándonos a la narrativa del desasosiego, una trampa mental en la que quieren que caigamos, sin poder accionar en la resolución de nuestras propias urgencias, autodestruyéndonos como sociedad.

No normalicemos esto y demos un salto a la proactividad, tenemos un deber moral con nosotros mismos y con el país de unirnos y recuperar lo nuestro.

Recordemos que un cambio real y palpable lo obtendremos cuando unamos fuerzas y organizados sepamos avanzar en esta lucha eminentemente ética.

 

Coordinadora de planificación y finanzas de Vente Los Salias

Docente especialista en dificultades de aprendizaje