Skip to main content
immediate bitwave Library z-library project books on singlelogin official

(San Antonio de los Altos. 13/09/2019) Desde que los politiqueros de turno se han dedicado al pragmatismo como base fundamental a su forma de surfear las olas de las tendencia, ha llevado con el tiempo a la creación del populismo basándose directamente en el clientelismo, y por supuesto más en el aprovechamiento del desconocimientos de las masas sobre la mayoría de los temas más fundamentales que se deben manejar a la hora de administrar una nación.

El populismo que tomó sus fueros luego que en buena parte del mundo se hizo “democrático”, ha hecho que dependiendo la realidad de cada lugar, tenga características distintas. Lo que es popular en un lugar en otros puede ser muy mal visto.

En naciones donde llegar tarde, decir mentiras, no ser honesto es algo muy habitual. Al llegar un populista que resalte esos “valores” se termina convirtiendo en un amalgamador de “ideas”, las que le terminan dando un piso político y crear una base popular. El ir repitiendo lo que en las calles dice la gente, así sean incongruencias, ha sido la forma en que personajes como Chávez, kirchner, Lula, Evo, entre muchos otros, llegaron al poder porque simplemente se apoyaban en las incoherencias de las mayorías que desconocen el cómo se deben hacer las cosas para que funcionen, pero como a ellos lo que les importaba era resaltar lo que repetían, para así lograr ascender al poder y desde allí hacer los cambios necesarios para atornillarse en el mando y de ser posible, dejar herederos.

La gran ventaja que tiene el populista es la apatía de las mayorías por formarse, y que éstas sin tener conocimientos de causas suelen dar opiniones en temas de los que no tienen ni la menor idea, eso hace una ensalada de desinformación generalizada que al entrar nuevos actores, estos terminan repitiendo las mismas barbaridades. La falta de interés por investigar y formarse en el ciudadano común, es y seguirá siendo, la base más sólida del populista porque sabe que a duras penas el ciudadano común hará algún esfuerzo en investigar si lo que dice es cierto o no, y esto para el populista es ganancia.

De más está decir que la única herramienta que tiene el ciudadano para no caer en manos de los populistas de turno es la formación constante, ya que cada día nacen nuevos retos y conocimientos que se expanden a la velocidad que lo hace el universo conocido.

*Agradecimiento a Fernando Navarro por dejarme en el blog un comentario con la frase que me inspiró el texto e intitulé el mismo.

@jfmarcano

Otros artículos del autor:

jfmarcano.blogspot.com