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Estudiantes reciben clases en hacinamiento

Jesús Solórzano, coordinador municipal de Formación de Cuadros de Vente en José Félix Ribas del estado Guárico, insta a estudiantes, maestros y familiares a luchar

(Tucupido. 08/10/2019) La Escuela Básica Arturo Álvarez Alayón, en Tucupido, estado Guárico, cerró sus puertas. Así lo denunció este lunes Jesús Solórzano, coordinador de Formación de Cuadros de Vente Venezuela en el municipio José Félix Ribas de esa entidad federal. Los estudiantes de esa escuela de primaria fueron reasignados a otro plantel educativo, de secundaria, “para, de forma amontonada y en un horario no conveniente, ver clases a medias, sin comida, sin ningún servicio”.

En compañía de Adrián Hernández, coordinador de Vente Venezuela en el municipio; Eudoro Padrino, coordinador municipal de Organización; Rafael Rondón, coordinador municipal de Promoción de Valores y Alina Vásquez, coordinadora municipal de Comunicaciones, Solórzano señaló, a las puertas de la clausurada escuela, que en el otro plantel educativo al que fueron reasignados los estudiantes, también existe el riesgo de colapso en las instalaciones.

“Hoy esta institución educativa está cerrada, mientras muchos niños venezolanos esperan ser educados […] La plata para el techo y para la comida sabrá Dios dónde andará, porque aquí no está. Hay mucha gente haciendo negocios a costa de la miseria de los venezolanos. Este colapso de las instalaciones del Arturo Álvarez Alayón es el resultado y la expresión de una política de depauperación del Estado criminal contra todo aquello que genere autonomía en el individuo, donde entra, desde luego, la educación [….] Esta es una de las desgracias más grandes que puede enfrentar la humanidad, el cierre de un plantel educativo”, expresó.

Por último, expresó su solidaridad con el personal que labora en ambas escuelas, con los estudiantes y con sus profesores y los instó a luchar: “Cuando el Arturo Álvarez Alayón abra nuevamente sus puertas tiene que ser para recibir a estudiantes que vengan a ver clases de calidad, con alimentación también de calidad en sus casas y con una moneda que tenga capacidad de compra para que los maestros sigan haciendo su gran trabajo. Pero entendemos que nada de esto será posible mientras las mafias continúen en el poder. De manera que nuestra lucha es por terminar de arrinconarlas, con fuerza y coraje, para derrotarlas. Ahí sí comenzaremos a abrir planteles educativos que formen ciudadanos libres”.