En estos momentos la UCV y su comunidad universitaria se encuentra a la espera de lo que ocurrirá el día 27 de febrero de este 2020. Ese día se cumple la sentencia N° 0324 la cual obligaba a la universidad a realizar elecciones internas bajo los parámetros establecidos en el artículo 34 de la Ley Orgánica de Educación, que indica que las elecciones deben realizarse en igualdad de condiciones entre profesores, egresados, estudiantes, personal administrativo y personal obrero, lo que viola la Ley de Universidades y además, es inconstitucional ya que vulnera el artículo 109 de la Constitución, dónde se indica que:
“El Estado reconocerá la autonomía universitaria como principio y jerarquía que permite a los profesores, profesoras, estudiantes, egresados y egresadas de su comunidad dedicarse a la búsqueda del conocimiento a través de la investigación científica, humanística y tecnológica, para beneficio espiritual y material de la Nación. Las universidades autónomas se darán sus normas de gobierno, funcionamiento y la administración eficiente de su patrimonio bajo el control y vigilancia que a tales efectos establezca la ley. Se consagra la autonomía universitaria para planificar, organizar, elaborar y actualizar los programas de investigación, docencia y extensión. Se establece la inviolabilidad del recinto universitario. Las universidades nacionales experimentales alcanzarán su autonomía de conformidad con la ley.”
Ya es normal que el régimen desde hace veinte 20 años quiera hacer y deshacer con las leyes y la Constitución y como una gran mayoría de la población, las desconoce, entonces lo aceptan sin más, y algo parecido está ocurriendo en “La Casa que Vence la Sombra”, aunque la FCU y los movimientos estudiantiles han tratado de dar a conocer la sentencia entre la comunidad universitaria, son aún muchos los estudiantes que desconocen que sucedería con la autonomía de la universidad si se cumple la sentencia y se da la intervención.
Es peligroso que sean felices en su ignorancia con respecto al tema ya que son vulnerables ante cualquier discurso trabajado pero repetitivo elaborado por cualquiera de las facciones del régimen que se camuflan dentro de la comunidad universitaria y están al asecho para tomar los espacios de nuestra universidad.
Se trata de instar a toda la comunidad universitaria a no jugar al juego del régimen que es la desinformación, ya que si jugamos a lo mismo que ellos, seremos vulnerables en su terreno, debemos informarnos y prepararnos cada día más para hacerles frente.
Y sí, ellos tienen las armas, pero nunca tendrán nuestro intelecto, ese que esta bella casa ha venido formando por generaciones que han ido pasando bajo las Nubes de Calder, y que el estar bajo estas, es una de las aspiraciones más grandes de todo ucvista y que podríamos perder si el régimen llegase a tomar la universidad.
Esto va dirigido para todos aquellos que como yo desean estar en algunos años recibiendo su título en el Aula Magna, pero si no defendemos la autonomía, no tendremos Aula Magna, o si existiese, sería usada para cualquiera de los programas nefastos que el régimen posee, o para “juramentar” milicianos.
Está en peligro nuestra autonomía y con ella todo el sentido de ser ucvista.
