Realmente hoy el ciudadano trabajador, vive una realidad que pareciera sacada de una película de ciencia ficción, desde que se levanta hasta el final del día. Tiene que caminar largos kilómetros para poder llegar a su lugar de trabajo, realiza la jornada con mucha responsabilidad y espera a que le sea cancelado su sueldo o salario… Y luego que le cancelan solo puede comprar un paquete de harina y cuando mucho medio kilo de queso…
Hoy el trabajador ve como se le esfuman sus sueños por darle una mejor calidad de vida a su grupo familiar, trabaja 30 días al mes, y solo compra comida para la cena, las otrora prestaciones sociales, hoy son un sueño, el régimen ha acabado con el derecho a tener una relación laboral estable, sólida, donde el trabajador se sentía seguro.
Realmente los trabajadores hoy somos los más afectados, maltratados y olvidados por parte del régimen, y más nos sentimos burlados cuando el usurpador dice que es un ‘presidente obrero’. Por esa razón, debemos articular acciones contundentes para salir a protestar contra la tiranía, la opresión, el hambre, la desidia y el olvido.
No podemos estar haciendo petitorios de migajas, ni mucho menos realizar cartas a organismos internacionales para que gestionen con el régimen un aumento a base de moneda extranjera. Lo que debemos hacer es unir fuerzas y cerrar filas para articular la salida del régimen, porque con esta manada de bandidos usurpando el gobierno, nosotros como trabajadores nunca tendremos un salario y una calidad de vida digna, acorde al esfuerzo y el mérito que desempeñemos.
Hoy las empresas cierran sus puertas y nos envían a la calle, dejando desamparados a nuestro grupo familiar, y esto nos obliga a buscar o rebuscar lo que en otrora se conocía como trueque, que nuevamente este régimen lo ha revivido, realizar un día de trabajo por un paquete de arroz, harina o pasta, y esto es lo que también ha obligado a nuestros hijos a salir en diáspora, para así poder ayudar con el sustento de la familia.
Como trabajadores, que somos un gran eje de impulso para la economía, el progreso y el desarrollo de cualquier país del mundo, hoy en nuestro país se nos persigue, ultrajan, y violan nuestros derechos, laborales y humanos. Ese modelo nefasto debe llegar a su fin y enrumbarnos por la senda de la Venezuela, Tierra de Gracia, en libertad, con respeto a la propiedad privada y al reconocimiento del conocimiento, el trabajo, el mérito y los logros individuales.
Comisionado Laboral Vente Zulia.