El origen de la discusión de la soberanía y el territorio del Esequibo entre Venezuela y Guyana se remonta a la época de la colonia, específicamente en el año de 1841, bajo el gobierno del General José Antonio Páez. Esta problemática limítrofe entre la Guyana y Venezuela data de muchos años, hay documentos que demuestra que este territorio le pertenece a Venezuela.
Esta disputa se resolvió primero con un laudo arbitral de París en 1899, la zona fue llamada Guayana Esequiba por Venezuela. Este laudo resolvía de “manera plena”, perfecta y definitiva todos los asuntos relativos a la determinación de la línea fronteriza entre la colonia de la Guyana Británica y Venezuela, esta sentencia le arrebató 159.542 kilómetros cuadrados de territorio a Venezuela, mediante las acciones ofensivas de dos potencias: Gran Bretaña y Estados Unidos.
Venezuela no se conformó con este laudo arbitral de Parìs, lo considerò nulo e irrito y lo denunció ante el seno de la Organización de las Naciones Unidas (ONU.) y ante la comunidad internacional, dando lugar a un proceso de negociación, donde surgió el Acuerdo de Ginebra, el cual era un instrumento que regulaba la reclamación de la soberanía de la Guyana Esequiba por Venezuela. Este tratado, que fue suscrito el 26 de mayo de 1966 entre Venezuela, Reino Unido de Gran Bretaña, Irlanda del Norte y la República Cooperativa de Guyana, las naciones que lo firmaron, se comprometieron a buscar y establecer una revisión, discusión, así como dar soluciones satisfactorias a una controversia que afectaba el territorio y la soberanía entre Venezuela y Guyana.
Esta disputa aún sigue en la actualidad, hay intereses de la República Cooperativa de Guyana de despojarle el territorio del Esequibo a Venezuela por las riquezas que se encuentran en esa zona como son: Recursos minerales y energéticos: oro diamante, mica, bauxita, manganeso, minerales radiactivos (uranio), petróleo y gas natural, de hierro y coltan, este último es un recurso estratégico imprescindibles en la fabricación de componentes electrónicos avanzados. Además de sus bellos paisajes y su diversidad biológica, hay abundante agua dulce y más de ocho millones de bosques, biodiversidad importante de fauna y flora.
Venezuela como un país soberano y con una historia de muchos años de esta controversia y con pruebas que este espacio territorial es nuestro, no debe permitir que esta nación nos arrebate este territorio que tiene un potencial de riqueza para los ciudadanos venezolanos y forma parte de nosotros y va contribuir al desarrollo y bienestar económico para Venezuela.
La ocupación de América Latina ha tenido como principal motivación el dinero.
Sandra Dugarte
Politólogo
Coordinadora de Formación de Cuadros de Vente en el municipio Barinas
@sanyadu