El hecho de nacer como objeto de la conquista emprendida por uno de los imperios de entonces, determinó que en los habitantes de la colonizada Venezuela se replicara el espíritu de libertad que comenzó a manifestarse hacia la segunda mitad de los años de 1700 en los Estados Unidos de América, Francia y en consecuencia, en muchas de las preestablecidas colonias de este hemisferio.
Este sentido de libertad se materializó cuando las colonias alcanzaron independizarse de los centros de poder político, y en cuanto a Venezuela, si bien los actores políticos del momento la definieron como REPÚBLICA, en oposición a la monarquía, no implementaron de manera inmediata, efectiva y eficaz las fórmulas políticas que identifican y definen una DEMOCRACIA.
En tal sentido, es oportuno resaltar los aspectos que, por una parte, definen a una republica y, por la otra, definen a una democracia, con el fin de descubrir sus puntos comunes, a saber:
El portal dle.rae.es/república, nos ilustra que la República presenta, entre varias, las siguientes características fundamentales:
1. f. Organización del Estado cuya máxima autoridad es elegida por los ciudadanos o por el Parlamento para un período determinado. (Omisis)
3. f. Por oposición a los gobiernos injustos, como el despotismo o la tiranía, forma de gobierno regida por el interés común, la justicia y la igualdad.
Por su parte, la página dle.rae.es/democracia, entre otros aspectos establece que la democracia se caracteriza por:
5. f. Sistema político en el cual la soberanía reside en el pueblo, que la ejerce directamente o por medio de representantes. (Omisis)
3. f. Forma de sociedad que reconoce y respeta como valores esenciales la libertad y la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.
Del examen de las dos instituciones se tiene que ambas se conjugan determinando que la República constituye la organización del Estado que la mayoria ciudadanía soberana quiere darse en ejercicio de su voluntad de ser libre bajo el imperio de la ley, de modo que es la masa ciudadana quien por oposición a los gobernantes injustos, despotas y tiranos, formula e impone el gobierno regido por el interés común, la justicia y la igualdad propios de una democracia. Atención con esto.
Los enunciados antes citados no se corresponde con ideas huecas, vagas y vanas, como algunos quieren hacer ver. No. Esos son los conceptos esenciales que permiten cumplir los valores propios de la ciudadania organizada bajo el imperio de la ley y no bajo las fórmulas de mafias que pretendiendo jugar a la ignorancia y el miedo imponen lo que la mayoría rechaza en un grito de libertad.
En definitiva, el momento exige que el espíritu de libertad que ánimo el rechazo al coloniaje y luego a las tiranías y el despotismo que le sustituyó practicante hasta hoy, vuelva a resonar, esta vez en una ciudadanía consciente de la necesidad de construir una sociedad con pleno sentido democrático como nunca se ha alcanzado de este lado del hemisferio.
Asdrúbal Romero Silva
Abogado, Msc. en Ciencias Penales
Secretario Político Municipal – DEM Barinas
@AsdrubalRomer16