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(Barcelona. 02/12/2022) Para el dirigente nacional de Vente Venezuela, Omar González Moreno, los “negociadores de la oposición quedaron como unos peleles que se dejaron manipular fácilmente en México”.

Afirmó que los enviados del «status quo» del G4 no solo tuvieron una actitud débil frente a los representantes de Miraflores sino que “se la pusieron bombita”, en alusión a la aceptación de la entrega de activos nacionales a quienes usurpan el poder político venezolano.

Tanto nadar –prosiguió– para ahogarse en la orilla; los resultados de las reuniones de Mexico fueron muy buenos para Maduro y muy malos para la causa de la libertad de Venezuela.

Aseveró que los representantes de la oposición fueron devorados como corderos por los “lobos hambrientos” del régimen de Nicolás Maduro, quienes “salieron con las manos llenas y la oposición sin nada”.

Omar González dijo que las condiciones electorales siguen siendo las mismas, los presos políticos siguen encarcelados, los exiliados aún continúan fuera del país y, en cambio Maduro salió con menos sanciones y con la certeza de disponer de millones de dólares que habían sido protegidos en el exterior.

El dirigente liberal manifestó que la pasividad de los miembros del Grupo de los 4 es aprovechada al máximo por quienes aún se sostienen en el poder en Venezuela.

“Hoy Maduro celebra con whisky y champagne, todo el dinero que le caerá; y no solo eso, sino que ahora el ocupante de Miraflores se siente con la fuerza de ningunear a la oposición, tratarlos como muñecos de paja y amenazarlos con acciones si no terminan de quitarle las sanciones que pesan sobre él y sus secuaces”.

El integrantes del partido de la libertad calificó como fracaso las negociaciones de México y ponderó a los negociaciones de la oposición como “pazguatos o cómplices de Maduro”.

Solo María Corina

Omar González advirtió sobre el afán de Nicolás Maduro de aprobar a como de lugar su proyecto del Estado Comunal, con el cual terminarían de aniquilar a la libertad y la institucionalidad nacional.

Señaló que sólo una elección de María Corina Machado como presidente de Venezuela echaría por tierra las pretensiones de los socialistas de crear un estado comunal, anti-democrático al estilo de los soviet de la antigua URSS.