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La política es una actividad crucial para la vida en sociedad, ya que es el ámbito donde tomamos las decisiones que afectan directamente la vida de las personas. Por esta razón, es fundamental que nosotros, los políticos, demostremos integridad y honestidad política, compromiso con el bienestar de la población y una actuación apegada a la ética y los valores cívicos.

Lamentablemente, en Venezuela, la política ha sido vista en los últimos años como una actividad corrupta, alejada de la sociedad y sin ninguna transparencia. Para recuperar la confianza ciudadana en la política, es imprescindible que nosotros, los políticos, nos comprometamos a actuar con ética, valores y transparencia.

La ética en la política se refiere a la moralidad y responsabilidad con la que debemos actuar en todo momento. Esta ética implica no solo el respeto a las leyes, sino también a los derechos humanos, la libertad y la justicia. La ética en la política es un factor que puede asegurar el bienestar de la sociedad, y por tanto, se convierte en una necesidad para recuperar la confianza ciudadana.

La formación es otra herramienta crucial para nosotros, los políticos. Una buena formación académica y una trayectoria en experiencias de liderazgo son necesarias para que seamos capaces de tomar decisiones acertadas y hacer frente a los desafíos que se presentan en la sociedad.

Además, la formación nos garantiza una comprensión adecuada de las realidades que afronta la sociedad, así como de las problemáticas que afectan a los ciudadanos. Por lo tanto, es fundamental que nos ocupemos de tener una formación de calidad para poder desempeñar nuestras funciones de manera efectiva.

La honestidad y la transparencia son valores que debemos tener presentes en todo momento como políticos. La transparencia resulta crucial en la política para garantizar que los procesos y la toma de decisiones sean claros y honestos, y que los recursos públicos sean utilizados de manera adecuada.

La honestidad, por su parte, resulta esencial para asegurar que actuemos con justicia, respeto y responsabilidad hacia la sociedad que nos eligió para representarlos. Como políticos, debemos cultivar estos valores y demostrarlos a través de nuestro trabajo cotidiano para recuperar la confianza ciudadana y dignificar la actividad política.

En Venezuela, durante los últimos años, ha habido una profunda crisis política y social, caracterizada por la falta de ética, valores, formación y honestidad por parte de los políticos. Esto ha generado una desconfianza hacia la política y un alejamiento de la sociedad a los espacios de participación ciudadana.

Para generar la confianza ciudadana que se requiere para promover y adoptar políticas públicas que ayuden a transformar la realidad venezolana, es fundamental que los políticos nos comprometamos a recuperar estos valores y principios.

Recuperar la confianza

La ética, valores, formación y honestidad son elementos esenciales para recuperar la confianza ciudadana en la política. Como políticos, debemos entender que, en la medida en que ejerzamos nuestra responsabilidad con estos valores, podremos representar con eficacia los intereses de la sociedad y mejorar la calidad de vida de la población.

Como ciudadanos, es crucial exigir a nuestros líderes y gobernantes que actúen con ética y honestidad, y contribuir a construir una sociedad más justa, próspera y equitativa.

En este contexto, recordemos que el próximo 22 de octubre se realizará el proceso de elección primaria para escoger al candidato o candidata que representará a la oposición y se enfrentará a Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales de 2024.

María Corina Machado es una opción que reúne todas las condiciones para conducir a Venezuela hacia mejores derroteros, ha despertado los mayores niveles de respaldo y expectativas en torno a su candidatura, ha demostrado liderazgo y carisma en cada uno de sus actos públicos y discursos. La elección primaria nos brinda la oportunidad única para el futuro de la política venezolana.

Por esta razón, es imprescindible la participación masiva de la ciudadanía como un acto de desafío al Status Quo, de esta manera contribuimos a la consolidación de un liderazgo que pueda garantizar la restauración de las plenas libertades, la democracia, la recuperación económica, el regreso de nuestras familias y el respeto por los derechos humanos en el país.

Seguimos en contacto.

Dios bendiga a Venezuela

 

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