No es que las personas olviden rápido, el punto es que el comunismo destruye a la historia. Bajo el sofisma de “crear hombres nuevos” el socialismo procura poner las páginas de la historia en blanco y cínicamente escribe un mundo nuevo, como si el pasado nunca hubiera existido.
Es dificultoso definir si encuadramos al comunismo como ideología o como un virus mental; no sabemos que sea más nocivo para Europa si los brotes de ébola o los brotes de socialismo.
Tampoco podemos olvidarnos que los dos grandes obsequios de Europa para el mundo fueron el fascismo y el comunismo. La palabra “libertad” como todos los términos conocidos, termina siendo desconocida por la multiplicidad de sus interpretaciones. “La libertad al igual que el respeto, es algo que se gana no que se pide”. Pedir elecciones a una tiranía, es como si Bolívar hubiera pedido elecciones a los españoles, en vez de firmar el decreto de guerra a muerte.
Cuando veo a “políticos neutros” solicitando dádivas al comunismo, solo se me vienen las palabras de Benjamin Franklin: “Los que pueden renunciar a la libertad para obtener una pequeña seguridad temporal no merecen ni libertad ni seguridad.”
Como lo he hemos estudiado a profundidad en otras publicaciones “No podemos desprendernos de la naturaleza humana a la hora de hablar de política”, los ciclos esenciales de la vida del hombre se definen en instantes de amor y en momentos de guerra. Todo aquel que defiende la libertad y sus ideales deben estar preparados para la guerra; como reza el antiguo adagio latín “si vis pacem, para bellum” que se traduce “si quieres la paz prepárate para la guerra”.
“La libertad siempre ha tenido enemigos poderosos” La espeluznante cadena de 20 atentados mortales que sufrió el Bolívar contra su vida, el atentado contra el Mariscal Antonio José de Sucre que lo dejó incapacitado de su brazo derecho durante el resto de sus días, el disparo en la cabeza que acabo con la vida de Lincoln, los más de 18 atentados que ha sufrido el ex presidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez y la homérica muerte del inspector Oscar Pérez que inflamó el rostro de llanto de los venezolanos, por nombrar algunos.
Hacer política en terrenos donde la libertad se ha perdido no es una tarea fácil, cuando defender la verdad se vuelve ilegal, la desconfianza y la traición se convierten en enemigos más peligrosos que el propio tirano. A la publicación de este articulo vemos como el derecho internacional que no pudo detener a Hitler, ahora intenta frenar al infeccioso comunismo castro-chavista; en estos ambientes hostiles de gran presión es donde se forman los testículos y los ovarios de hierro.
En el fluir del tiempo la historia ha cincelado una colección de las “damas de hierro”, el Reino Unido tuvo a su primera ministra Margaret Thatcher, Alemania tubo a su canciller Angela Merkel, Israel tuvo a su primera ministra Golda Meir, la India tubo a su primera ministra Indira Ghandi y Venezuela tiene a María Corina Machado la diputada electa con más votos en el país y la única voz opositora dentro del territorio nacional que asume la postura sacar al régimen por la fuerza.
Cuidar la libertad de Latinoamérica, es cuidar “la zona más pacífica del planeta”, la libertad de las naciones latinoamericanas es vital para el equilibrio del mundo. Como señalaba el libertador: «La libertad del nuevo mundo, es la esperanza del universo»
Queridos lectores saldaremos este articulo con la frase de Václav Havel: “Culturas hay muchas, pero civilización hay una sola, es donde se respetan los derechos individuales”.
Froilán Roa Garnica
Coordinador Electoral Vente Táchira.