Es bien sabido el rechazo de la política en nuestro país por parte de los ciudadanos, sencillamente esto se debe a la mala práctica de la política en manos de los politiqueros; errores tras errores han decepcionado a la ciudadanía, provocando ese desanimo bastante peligroso para darle una conducción real de cambio a nuestra nación.
Si miramos el panorama actual, nos podemos dar cuenta que la mala práctica de la política sigue imperando, es por ello que los ciudadanos tenemos el deber de desplazar esos liderazgos que solo quieren hacerse del poder para su propio beneficio, y no para servir, que es el verdadero objetivo de la política. En este sentido entra en juego el problema ideológico. Venezuela ha vivido en carne propia lo criminal que es el sistema socialista, esto ha dado paso a que las ideas que funcionan tomen una posición bastante privilegiada en el panorama político, porque es bien sabido que en décadas anteriores era imposible hablar de libre mercado abiertamente sin que produjera rechazo en la sociedad. Es un paso muy importante que hemos dado para lograr el desarrollo de nuestra nación.
Pero esto también ha desencadenado una ola de oportunistas, partidos políticos y políticos que ahora quieren llevar el estandarte del liberalismo cuando siguen implementado las mismas prácticas politiqueras y populistas, quedando al desnudo, es decir, solo quieren hacerse del poder para seguir implementado las mismas políticas saqueadoras que llevaron a nuestro país a la miseria en que vivimos.
Es por esta razón que es necesario hacer un cambio estructural, pero para ello debemos estar preparados, listos para desenmascarar a esos falsos liberales. En este sentido debemos estar atentos de las ideas que proponen y no de lo carismático o simpático que sea el líder.
Hoy los venezolanos tenemos la oportunidad histórica de hacer una ruptura con el socialismo del pasado y del presente; para finalmente avanzar hacia la construcción de esa Venezuela de libertad y progreso, que sólo vamos a tener bajo el sistema liberal.
Para la reflexión…
Cuando un político toque nuestra puerta y nos ofrezca dadivas, tenemos todo el derecho y el deber de correrlo y cerrarle la puerta, puesto que este mismo político una vez en el poder viene por nuestra libertad.
¡Sigamos luchando por la verdadera libertad de nuestro país, la vamos a lograr!
@julio17_gtz
Coordinador de Organización
Vente Joven Yaracuy