La Casa de la Libertad abrió la puerta a más de 20 proyectos de emprendimiento. La Venezuela decente se niega a rendirse ante el sistema socialista
Por Williams Perdomo | @WPerdomoD
(Caracas 20.10.19) Emprender en Venezuela es un acto de rebeldía. El socialismo se ha encargado de destruir todo el aparato productivo del país, pero eso no ha impedido que los venezolanos continúen creyendo en una economía libre, en mercados abiertos.
Es una farsa afirmar que en este país no funciona el pensamiento liberal, porque Venezuela en la práctica lo es. Recorrer los estados del país confirma que en cada rincón hay una ciudadanía que se mantiene de pie y que no acepta regalías de nadie, sino que sabe que la mejor manera para prosperar es trabajar.
Una demostración de eso fue que este miércoles en la quinta El Bejucal, mejor conocida como la Casa de la Libertad, al menos 23 emprendedores demostraron que hay una generación que, con coraje, continúa emprendiendo en Venezuela a pesar de las dificultades.
La Casa de la Libertad se llenó de los dulces, la comida, la ropa y el arte de personas de todo el país que entienden que la prosperidad es construida de manera honesta; con trabajo, dedicación y esfuerzo.
Estuvieron acompañados de María Corina Machado, quien aplaudió la iniciativa y el talento de estos emprendedores.
Colores, emoción y entusiasmo fue lo que se encontró esa tarde en la primera feria de emprendedores organizada por la casa. Tatiana de la Rosa, emprendedora de la marca By de la Rosa, explicó que es necesario seguir impulsando el talento venezolano.
“Nuestro país es un país lleno de recursos, bellezas naturales, gente trabajadora y creativa. Por supuesto se merece que sigamos trabajando y luchando por su presente, por su futuro y el de las siguientes generaciones, para que todos lo veamos prosperar”, dijo De la Rosa.
Añadió: “Además,ante las adversidades nos hacernos más fuertes y mejores venezolanos tanto los que estamos aquí como los que han tenido que irse para trabajar en otras latitudes buscando oportunidades; el día de mañana regresarán fortalecidos con la experiencia, con los aprendizajes y dispuestos a hacer su parte por la reconstrucción de la Venezuela que todos soñamos”.
Los participantes del evento coincidieron en la importancia de seguir trabajando en medio de un sistema que dificulta el desarrollo normal del proceso de emprendimiento. Pero con optimismo y dedicación, estos ciudadanos se mantienen de pie dando la cara y demostrando que los venezolanos son personas trabajadoras a las que les gusta conseguir lo que tienen, bajo el precio de la honestidad y el esfuerzo.
“Para emprender en Venezuela hay que tener mucha fe, resistencia y paciencia. Van a ver obstáculos. La situación te pone en desventaja con otros países, pero con resiliencia sí se puede ser exitoso”, señaló Annyk Tovar, creadora de Voltea La Arepa.
La Venezuela emprendedora no se rinde en medio de la crisis económica más difícil de nuestra historia republicana. Este evento demostró que quienes se quedan en el país tienen más futuro que pasado y presente, y que en una verdadera República Liberal, con instituciones sólidas, con Estado de derecho en el que haya seguridad jurídica, estas ideas se impulsarán y pondrán a Venezuela de primera y liderando la economía de la región y por qué no, del mundo.
“En Voltea La Arepa tenemos un enamoramiento por nuestro país. Venezuela es fértil, tiene gran potencial. A pesar de la crisis, sentimos que tenemos millones de oportunidades. Enfrentamos un momento muy duro, pero hay mucho para emprender”.
¿Cómo se empieza a emprender en Venezuela?
Tatiana de la Rosa explicó que el inicio no es sencillo, principalmente se deben evaluar las condiciones del mercado y ante las complicaciones que se vayan presentando, se debe ir resolviendo e innovando.
“No es tarea fácil. La incertidumbre, la inflación, hace que cada día haya que reinventarse. Conseguir materiales novedosos es complicado y esto nos obliga a desarrollar la creatividad, el buen gusto, a adaptarnos al manejo de diferentes escenarios, buscar en las redes sociales clientes tanto dentro como fuera de Venezuela, debido a la crisis ha mermado el poder adquisitivo y lo que hacemos no es un producto de primera necesidad, aunque la mujer venezolana es coqueta y siempre busca la ocasión para estar bien arreglada y vestirse y lucir accesorios modernos y diferentes”.
Y resaltó que aquellos que quieran iniciar un emprendimiento “no deben tener miedo, que con constancia y pasión se logra desarrollar un proyecto propio; que te inspire, que te permita ser creativo, innovar y buscar siempre las oportunidades. Todo eso siempre te permite adquirir experiencia”.
Aunque emprender parece difícil, cuando se hace con pasión solo se consiguen sonrisas y brillos en los ojos, como los tenían todos los emprendedores esa tarde. El día finalizó con lluvia, que puso todo oscuro, tal como lo hace el socialismo. Sin embargo, las ganas, el empeño y la energía de estas personas alumbraron la casa y es una certeza que así de luminosa como terminó siendo aquella noche, será la nueva Venezuela que ayudaremos a construir.
“Emprender es un aprendizaje único que te fortalece a ti, a tu entorno directo y a la sociedad venezolana”, concluyó.
