Skip to main content
immediate bitwave Library z-library project books on singlelogin official

En Venezuela vivimos en condiciones miserables, vivimos la paradoja,  somos los ricos pobres,  la economía está destruida,  sin moneda,  sin trabajo,  sin servicios,  sin producción,  sin sistema de salud.

Venezuela es rica;  si, sus recursos, su gente, sus sueños, su fe.

¿Qué pasó entonces?  Parece que llegó un torbellino y arrasó con todo,  aun con la vida de sus hijos. Lo que sucedió en Venezuela fue muy bien planificado, y el resultado desastroso también fue el esperado por sus autores, llevar al venezolano al punto de dependencia total del Estado, de humillación y oprobio.

Por supuesto que la mayoría no hemos permitido ese control sobre nuestras vidas, nos hemos enfrentado y continuamos utilizando todo medio a nuestro alcance para conseguir nuestra libertad. Las marchas,  huelgas, protestas en la calles, el asombroso éxodo masivo, no han sido suficiente para lograrlo, pero si para llamar la atención del mundo, ahora los instrumentos legales y representantes legítimos ante el mundo deben ser coherentes y decir la verdad con valentía y coraje.

Solo una cosa es necesaria para que nuestras vidas cambien y prosperen de la noche a la mañana, sacar a Maduro y todas sus mafias del país. Nos dicen, no es posible, ellos tienen las armas, nadie nos ayudará, nadie invertirá en salvarnos. Lo que pasa es que, si nadie invierte en salvarnos,  nadie estará a salvo. Esa máquina de maldad tiene muchos intereses y aun a los interesados destruirá.

Para salir de Maduro y sus mafias lo primero que nos asiste es la verdad, cuando la verdad sale a la luz tiene una consecuencia maravillosa y esa es la libertad. La legitimidad, la Constitución Nacional, las leyes nacionales e internacionales. También nos asisten los tratados y organismos internacionales, tanto para protegernos como para atraparlos y hacernos justicia.

La verdad,  ¿quién es Nicolás Maduro?,  ¿quienes son sus mafias?, sus cómplices, su origen, sus delitos, el daño que han provocado a Venezuela y al mundo. Descubriendo uno a uno todos sus delitos,  denunciarlos ante todas las instituciones del mundo  para que sean conocidos como lo que son realmente, que todo el mundo sepa como han violentado nuestra soberanía, nuestros derechos, la constitución, las leyes nacionales y las internacionales. La verdad para que se pueda aplicar la ley y haya justicia.

Solo una cosa es necesaria, sacar a Maduro y sus mafias,  mafias de toda índole. Para ello nuestros legítimos gobernantes deben esforzarse en salvar nuestras vidas,  respetando y ejerciendo legalmente su legitimidad como representantes nuestros y acudir a esas leyes y tratados que nos asisten.

Deben decir la verdad al mundo, decir quien es Maduro con todas las letras mayúsculas y minúsculas,  quien lo sostiene en el poder usurpado;  deben reconocer verdaderamente al legítimo presidente de Venezuela, Juan Gerardo Guaidó como tal, al TSJ y a la Fiscalía que nombraron y que se encuentran en el exilio; deben decir la verdad porque no podemos ir a elecciones con delincuentes, enumerar cada una de la razones; deben desconocer a todos los diputados que quebrantaron e irrespetaron su investidura, a los venezolanos, las normas y la Constitución; deben manifestar, por oficio legal, nuestra condición verdadera y solicitar la protección e intervención humanitaria que necesitamos y pedimos a gritos.

Solo una cosa es necesaria, decir la verdad y la verdad nos hará libres.