Pésimas condiciones de los centros de reclusión en el estado generan el brote de múltiples enfermedades.
Familiares y abogados, así como organizaciones vinculadas al tema, denuncian la situación a través de las redes y otros medios de comunicación.
(San Felipe. 11/07/2020) Marbella Gutiérrez, abogada y miembro del Comité de Derechos Humanos de Vente Venezuela en Yaracuy, denunció este sábado la muerte de 17 privados de libertad por Tuberculosis, así como el brote de enfermedades que se ha generado en los centros de reclusión de la entidad. “La desidia en los centros de reclusión y la deshumanización de los cuerpos represores del régimen han generado al menos 17 muertes por tuberculosis en Yaracuy en lo que va de año”, dijo.
La defensora de los Derechos Humanos, mencionó que no sólo hay infectados con tuberculosis en dichos centros, sino que existen privados de libertad con enfermedades como gastroenteritis, escabiosis, sida, hepatitis; lo que los hace más vulnerables ante la Covid-19, debido a las mínimas condiciones de salubridad.
“Las cifras de contagiados por dichas enfermedades es desconocida, en virtud de las políticas de opacidad adoptadas por el régimen y los cuerpos represores que controlan dichos centros. A duras penas se pudo conocer el número de decesos por tuberculosis, correspondiente a este año, gracias a los familiares que alzaron la voz”, dijo.
Indicó que someten a los privados de libertad a precarias condiciones, al ser tratados como desechos de la sociedad, en las circunstancias más deplorables e inimaginables, incluso, al límite de la muerte por las endemias en que se hunden intramuros.
“Es suficiente con hacer un breve recorrido en los alrededores de las instalaciones policiales para constatar los fétidos olores que mezclan comidas grasientas, heces fecales y otros desechos, para darse cuenta de las pésima condiciones en que se encuentran. El trato denigrante e indigno que reciben los reclusos constituye una sistemática violación a sus derechos humanos”, acotó.
Ante esto, alertó que Venezuela no cuenta con un Poder Judicial eficaz, independiente, imparcial y autónomo, que sea verdaderamente garante del acceso a la justicia, sino que propicia el retardo procesal y el hacinamiento insalubre de presos en los centros policiales.
“Seguiremos denunciando ante los organismos internacionales la situación que se vive en los centros de reclusión del estado Yaracuy y de todo el país. Es necesario recuperar la institucionalidad democrática y el respeto a los derechos de los privados de libertad”, concluyó.