La supranacionalidad, se entiende como una forma de organización internacional que engloba a varios Estados con fines y medios propios, con autonomía en relación a los países miembros, especialmente en la persecución de sus fines, en la formación de sus órganos y el derecho de dictar normas obligatorias para las naciones miembros. Actualmente, existen múltiples instituciones supranacionales tales como: la Otan, el Tiar, la OEA, la ONU, la UE, por mencionar algunos.
Hoy en Venezuela se agotaron todas las vías para la resolución del conflicto que ha generado la desestabilización de todo el hemisferio occidental; más de 15 diálogos y mesas de negociación con la participación de algunos países, del Vaticano y de Comisiones de Paz. Hemos participado en casi tres decenas de contiendas electorales y hasta el día de hoy, se han aniquilado todas las condiciones. Hemos protestado de todas las formas. Se han sacrificado muchas vidas, miles encarcelados y más de 5 millones en la diáspora más grande en la historia del continente.
Una Operación de Paz y Estabilización (OPE) como apalancamiento para activar cualquier institución supranacional ya existente, es la única opción viable y real para poder desocupar a un país que hoy se encuentra secuestrado y ocupado por grupos terroristas, carteles y países saqueadores de nuestra nación; la Farc, ELN, Hezbollah, Cartel de los soles, Sinaloa y otros, colectivos, Irán, Rusia, China y Cuba forman un conglomerado criminal que pone en peligro la seguridad nacional de los países del continente.
La conformación de una coalición internacional que despliegue una OPE, es lo que a partir de ahora todas las fuerzas democráticas deben empujar como único objetivo para lograr el cese de la usurpación, que desencadenará en una operación multifacética con un interés global y principalmente hemisférico, para garantizar la paz de cada nación democrática que en este momento está en la mira de estos grupos que hoy ocupan Venezuela.
Toda elección, diálogo y quiebre interno están descartados por los ciudadanos. Los lobbies que hasta ahora han estado operando con nuestros principales aliados para buscar una salida negociada y no de fuerza, que ha dilatado en gran parte el accionar de una amenaza real, se deben frenar ya y comenzar a direccionar de una vez por todas hacia la conformación de una coalición internacional con el despliegue de una OPE, que debería dedicarse a seis tareas específicas: control del territorio, seguridad y desarme, asistencia humanitaria primaria, reconstrucción de la infraestructura de emergencia y de los servicios públicos, restauración de la ley y el orden, promoción del Estado de Derecho y la reinstitucionalización democrática del país.
Esa es la verdadera unidad que se requiere y que toda Venezuela pide a gritos. La verdadera unidad de propósito pasa por impulsar una Operación de Paz y Estabilización.
(@JesusFariasVen)