A través de la economía formal se trata de incentivar a los trabajadores ambulantes a convertirse en emprendedores, en microempresarios o empresarios, como iniciativa de un gobierno liberal para el mejor porvenir, desarrollo y bienestar de todos los ciudadanos.
La economía formal está en los parámetros reguladores del Estado, cumple con la normativa fiscal, laboral y medioambiental; se paga impuestos, tiene todas las licencias de actividad (seguro social y registros administrativos), mientras que la economía informal o también llamada economía irregular, es la actividad económica invisible al Estado, por razones de evasión fiscal o controles administrativos.
Se hace necesario que todas esas ventas ambulantes y trabajadores informales que se encuentran en todas las calles, esquinas y alrededores de una determinada ciudad, llevarlos a microempresarios o empresarios, estableciendo políticas públicas que permitan la formalización de esas empresas y se inscriban en el correspondiente registro y se pongan a cumplir con sus obligaciones fiscales y laborales. Para eso se debe hacer diálogos, acuerdos y créditos pagaderos a las condiciones económicas de los trabajadores informales, establecer centro comerciales o sitios acordes que los beneficien.
Entonces, se puede decir, que una economía formal es una actividad económica legal, que los bienes pueden ser gravados y se incluyen en el cálculo del producto nacional bruto de un gobierno, que es el valor de mercado de todos los productos y servicios producidos por las empresas de un país, mientras la economía informal son menos institucionalizadas; ciertas economías latinoamericanas, obligan a los trabajadores a entrar a la economía informal, para así prevenir el desarrollo económico, lo cual trae como consecuencias, problemas sociales, económicos y financieros a una nación.
Sandra Dugarte
Politólogo
Coordinadora de Formación de Cuadros del municipio Barinas
@sanyadu