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Este sábado 20 de agosto, la ciudad primogénita del continente americano, mostró su rostro de una madre desterrada, desvalida, con una orfandad terrible. Con dolor más grande que el que cargó el profeta Jeremías, cuando los hijos de Israel desconocieron a su verdadero Dios, para unirse a la idolatrías de falsos dioses egipcios.
Una Ciudad sin aliento, destruida por la insensibilidad de sus gobernantes, que durante mucho tiempo, han estado expropiando sus recursos naturales para sus arcas personales; y han sido in capaces de devolverle a gracia de una tierra prodigiosa.
Así lo describía el colega periodista cumanés, Domingo Luis Díaz: «Torrenciales lluvias en Cumaná con tormentas eléctricas y desbordamiento de aguas en el alcantarillado. Cumaná inundada por los cuatro costados».
Cierto es, que precisamente este sábado, cuando un grupo de miembros de la sociedad civil de la ciudad de Cumaná, en nombre de un conglomerado de decenas de cientos cumaneses, que no asumen el coraje de salir a la calle, a tomar las riendas de sus problemas, como el caso de la distribución de un agua no totalizada; de mala calidad y además mal oliente, que tiene en jaque la salud de toda una ciudadanía, como consecuencia de la desinversión de un régimen maula, nos deviene este diluvio, como una expresión diocesana, como si el fenómeno fuera una advertencia divina, que nos hablase y nos dijese del arrepentimiento que debemos hacer como sociedad para alcanzar nuestra propia liberación de esta ignominia “chavista”.
Al respecto Rafael Marín, también periodista margariteño, refirió una crónica donde dice, entre otras notas, que la mañanera y sabatina jornada de reclamo, exigencia pública por la prestación de un servicio público vital para la gente como lo es el suministro de agua tratada para el consumo humano en la ciudad se hizo presente en Cumaná.
«Hoy al atravesar el vetusto, y objeto de pésima restauración, puente «Guzmán Blanco», observamos en la acera oeste de la Plaza Miranda una pancarta, con la leyenda sobre solicitud de «Ya agua potable»… Tomé la gráfica y luego defino las figuras humanas…entre otros recuerdo los nombres de Lope Marín, Raul Blanco, Horacio Zapata, Franca Caserta, Fredis Guzmán, Rafael Ortiz».
Luis Carvajal
Secretario Político Vente Sucre