Venezuela se encuentra en un momento crucial de su historia. Un régimen autoritario y corrupto ha sumido al país en una crisis sin precedentes, tanto política como económica y social.
Sin embargo, en medio de la oscuridad, surge una esperanza que brilla con intensidad: María Corina Machado, una líder liberal con una enorme base de seguidores y una confianza inquebrantable, dispuestos a llegar hasta el final en este proceso.
Ante la inminente amenaza de ser derrotados en las elecciones presidenciales, los funcionarios de la tiranía venezolana han mostrado su miedo y desesperación. El acoso y la persecución hacia María Corina y sus seguidores se han intensificado en un intento desesperado de mantenerse en el poder, pero este aumento en la represión solo pone de manifiesto la fragilidad de un régimen que ve como su control se desvanece ante el avance indetenible de la líder de la esperanza.
El poder de la tiranía para generar miedo a los ciudadanos se revirtió, son ellos ahora presas del miedo, porque saben que van de salida.
María Corina Machado se ha convertido en una verdadera amenaza para el régimen. Su liderazgo, coraje y su compromiso con los valores fundamentales de la libertad y la democracia se ha ganado el corazón de millones de venezolanos. Su popularidad se refleja en las encuestas, donde supera con creces a cualquier otro candidato. Es evidente que el pueblo venezolano está cansado de la opresión y el sufrimiento, y María Corina encarna la esperanza de un futuro mejor.
Es crucial que los ciudadanos y seguidores de María Corina no permitamos que el miedo nos paralice. La búsqueda de la libertad y el restablecimiento de la democracia no pueden ser detenidos por el temor de aquellos que han oprimido al pueblo durante tanto tiempo. Es momento de mantenernos firmes, perseverar en el camino hacia la libertad y seguir brindando hasta el final, apoyo a María Corina.
El miedo es, sin duda, una poderosa arma utilizada por las tiranías para mantener su dominio. Pero también puede ser su mayor debilidad. La tiranía venezolana sabe que no puede ignorar ni subestimar la descomunal ventaja y el respaldo popular que María Corina Machado posee. Su liderazgo representa una amenaza latente para el régimen.
La conquista de la libertad es un objetivo alcanzable. Mientras los funcionarios de la tiranía intentan aferrarse al poder mediante el acoso y la intimidación, los ciudadanos y seguidores de María Corina debemos permanecer fuertes y demostrar que no nos dejaremos amedrentar, tal como lo hizo hoy 5 de octubre, nuevamente María Corina, cuando las fuerzas militares intentaron impedir su paso para llegar a Carabobo. El futuro de Venezuela está en manos de aquellos que no temen a la tiranía, de los que no se rinden ante el miedo y que están dispuestos a luchar por un país mejor.
La valentía y el ímpetu de quienes persiguen la libertad son fundamentales para lograr el cambio deseado. Cada paso dado en el camino hacia la libertad es un avance en la dirección correcta. Cada muestra de resistencia y apoyo hacia María Corina Machado fortalece la oposición y debilita aún más a un régimen que ignora los deseos y el sufrimiento del pueblo venezolano.
La historia nos ha enseñado que las tiranías no pueden perdurar eternamente. El régimen venezolano no será la excepción. La libertad y la democracia llegarán a Venezuela, y será gracias al coraje y la determinación de personas como María Corina Machado y sus seguidores.
Es hora de dejar atrás el miedo y abrazar la esperanza. La lucha por la libertad siempre vale la pena, y el camino hacia un futuro mejor en Venezuela está trazado. No nos dejemos amedrentar por la tiranía. Mantengamos nuestra fortaleza y sigamos adelante hasta el final, en el camino hacia la libertad.
Pedro Galvis
Coordinador de Vente Lechería